PRIX VERSAILLES
LLAMAMIENTO INTERNACIONAL
PRENSA
POR UN RENACIMIENTO CULTURAL DE LA ECONOMÍA
Junio 2020
Con el Prix Versailles, arquitectos, chefs, ganadores del Premio Nobel de Economía y líderes de organizaciones internacionales hacen un llamamiento por un renacimiento cultural de la economía.
La crisis actual y las restricciones que ésta impone han enfatizado la importancia que cada uno de nosotros le da al entorno circundante. Paralelamente, destacan todas las dimensiones de este entorno, formado por la cultura, la naturaleza y los lazos sociales.
Esto coincide con una de las observaciones realizadas durante muchos años por la comunidad internacional - y en particular por la UNESCO -, reconociendo que la cultura tiene su lugar en el concepto de desarrollo sostenible.
Esa dimensión cultural en cuestión da forma a nuestras condiciones de vida; es indisociable de la economía cotidiana y es por eso que encuentra un eco tan fuerte en las circunstancias actuales.
El crecimiento en el componente cultural del valor agregado se ha convertido en una tendencia poderosa, que ya está encontrando su lugar en las políticas públicas y las estrategias empresariales.
En este contexto, los territorios que mejor preserven los elementos originales de su identidad podrán beneficiarse, si logran desarrollarlas con éxito, en verdaderas ‘ventajas competitivas’.
Esta revitalización cultural de nuestro entorno local no significa una falta de interés en sociedades distantes. Nuestro apetito por otras culturas y la necesidad de conocerlas mejor no puede evitar expandirse en el mundo del mañana.
Todos los territorios, incluidos aquellos con menos recursos económicos y tecnológicos, pueden tener un mensaje cultural a transmitir. Por lo tanto, se trata de ofrecer a cada uno de ellos la oportunidad para mostrar que los hace únicos, en un mundo cuya estandarización sería señal de empobrecimiento y desvitalización.
A pesar de su creciente importancia, lo cultural no ha sido suficientemente considerado como un ecosistema; permanece percibido desde un ángulo colateral.
Las ciudades y pueblos son emblemáticos de este hecho. Los espacios públicos y privados deben ser funcionales y estar en armonía con las aspiraciones de los habitantes.
La arquitectura y el diseño pueden contribuir a reinventar un mundo urbanizado que englobe las líneas de ecología, convivencia y belleza.
Esta dinámica alentará un mercado continuo de apreciación cultural por el hábitat.
Más allá, el entusiasmo por el arte de vivir continuará su ascenso.
Esto es cierto en el caso de la alimentación que en adelante nos gustaría que fuera más simple para el planeta, más justa y significativa. Esto también se aplicará al turismo, que debe asumir un papel más responsable. En cuanto a las tecnologías digitales, su credibilidad aumentará a través de la calidad del contenido creado y difundido.
En este movimiento, la economía púrpura propone un cambio de escala y percepción, al favorecer un enfoque sistémico donde las diversas actividades y factores culturales (educación, información, comunicación y todos los bienes con un fuerte componente imaginario y sensible) no se consideran de forma aislada.
A costa de esta transformación, la economía, impregnada con todo el potencial de la cultura, expresará plenamente su carácter humano.
Esta evolución allanaría el camino hacia una prosperidad global, más respetuosa con el medio ambiente natural y más equitativamente distribuida.
Lo que alguna vez fue una oportunidad, ahora deberá convertirse en el presente del desarrollo sostenible.
Ferran Adrià, Chef - Massimiliano Alajmo, Chef - Elena Arzak, Chef - Rafael Aranda, Arquitecto - Shigeru Ban, Arquitecto - Massimo Bottura, Chef - Mariya Gabriel, Comisaria Europea de Innovación, Investigación, Cultura, Educación y Juventud - Jérôme Gouadain, Secretario General del Prix Versailles - Ángel Gurría, Secretario General de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) - Iris van Herpen, Diseñadora de moda - Kengo Kuma, Arquitecto - Pascal Lamy, Presidente de Les Musiciens du Louvre - Eric Maskin, Premio Nobel de Economía 2007 - Jean Nouvel, Arquitecto - Edmund Phelps, Premio Nobel de Economía 2006 - Renzo Piano, Arquitecto - Anne-Sophie Pic, Chef - Carme Pigem, Arquitecta - Christopher Pissarides, Premio Nobel de Economía 2010 - Zurab Pololikashvili, Secretario General de la Organización Mundial del Turismo (OMT) - David Sassoli, Presidente del Parlamento Europeo - Vera Songwe, Secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para África de la Naciones Unidas - Jean-Noël Tronc, Gerente General de la Sociedad de Autores, Compositores y Editores de Música (Sacem) - Ramón Vilalta, Arquitecto.